Según lo que necesites hacer en Internet, el tipo de dispositivo que desees conectar y cuánto tiempo vayas a necesitar el servicio de Internet, hay muchas soluciones para acceder a Internet sin wifi. A continuación, encontrarás 4 de las mejores opciones para mantenerte conectado desde cualquier lugar.
1. Wifi público
Las redes wifi públicas son una opción para tener wifi sin Internet mientras vas de un lugar a otro. Muchos lugares públicos, como aeropuertos, hospitales, centros comerciales, algunos parques públicos y bibliotecas, ofrecen conexión wifi para todos. Otros lugares, como cafeterías, hoteles y restaurantes, ofrecen wifi gratis a sus clientes.
Conectarse a las redes wifi públicas suele ser bastante fácil. Solo tienes que buscar una red wifi disponible cerca de tu ubicación y encontrar el nombre correspondiente. Una vez que te hayas conectado, deberías poder empezar a usar Internet. Aquí tienes una guía más detallada:
Cómo conectarse a una red wifi pública:
- Abre la configuración de wifi de tu dispositivo.
- Busca una lista de las redes disponibles.
- Elige el nombre de red que coincida con tu ubicación (por ejemplo, "ClienteCafé" o "WifiBiblioteca").
- Si no aparece automáticamente una página de inicio de sesión o de acuerdo, abre tu navegador e intenta visitar un sitio web; a menudo serás redirigido.
- Sigue las instrucciones que aparecen en pantalla para aceptar los términos o introducir tus credenciales (en algunos lugares se requiere una contraseña; si es necesario, pregúntale al personal).
- Una vez que hayas iniciado sesión, comprueba tu conexión abriendo una página o una app.
Utilizar una red wifi pública tiene algunas desventajas. En primer lugar, la velocidad de wifi se basa parcialmente en el ancho de banda. Por lo tanto, si hay mucha gente tratando de usar la red wifi pública a la vez, el ancho de banda se divide entre cada usuario que intenta descargar y cargar información. Esto significa que la conexión a Internet en un lugar público tal vez no sea tan rápida como una conexión privada. Si necesitas hacer algo que requiere mucho ancho de banda, como hacer una videollamada, es posible que el wifi público no sea la mejor opción para ti.
Además, las redes wifi públicas no son tan seguras como las conexiones privadas. Como cualquiera puede conectarse a estos espacios, hay mayores probabilidades de que alguien con intenciones maliciosas se conecte en la zona. Para evitar este riesgo, puedes utilizar una red privada virtual (VPN) para cifrar los datos mientras trabajas desde tu laptop en una red wifi pública. Además, cuando termines de utilizar una red wifi pública, asegúrate de desconectarte por completo de la red.
2. Hotspot móvil
Otra forma sencilla de tener wifi sin Internet cuando estás lejos de casa es usar tu teléfono móvil como hotspot personal. La mayoría de los dispositivos móviles ofrecen la opción de convertir el dispositivo en un proveedor de Internet portátil al crear una red wifi privada que puedes vincular a tu laptop u otros dispositivos. Veamos cómo funciona en más detalle:
Cómo configurar un hotspot móvil:
En iPhone:
- Ve a Configuración > Celular > Hotspot personal.
- ACTIVA Permitir que otros se unan.
- Se generará una contraseña wifi; úsala para conectar tus otros dispositivos.
EN Android (puede variar ligeramente):
- Ve a Configuración > Red e Internet > Hotspot y uso compartido de datos.
- Toca Hotspot wifi y ACTÍVALO.
- Puedes cambiar el nombre de la red y la contraseña si lo necesitas.
- Conecta tu laptop o tablet usando la información que se muestra.
Sin embargo, al crear un hotspot móvil con tu teléfono, los datos de tu plan se consumen rápidamente, por lo que tienes que saber la cantidad de datos que incluye tu plan y cuánto cobra tu proveedor de servicio por superar ese límite de datos, ya que los cargos por excedentes de datos pueden acumularse muy rápidamente. Muchos ISP tienen varios planes de datos hotspot entre los que elegir. Ten en cuenta que los hotspots wifi pueden ser vulnerables a los piratas informáticos, ya que tu conexión está a la vista de cualquiera que esté a tu alrededor.
Si viajas con frecuencia, sobre todo si viajas a zonas remotas o fuera del país, comprar un hotspot personal puede ahorrarte tiempo y dinero. Los hotspots personales actúan como enrutadores móviles. Para usarlos, tendrás que comprar un plan de datos a un proveedor de servicios de Internet (ISP) e invertir en el hotspot adecuado para tus necesidades. Muchos ISP venden hotspots personales que funcionan solamente con sus planes de datos. También puedes comprar hotspots móviles no conectados que funcionan con casi cualquier ISP.
Al comprar un hotspot móvil, es importante recordar que no todos son iguales. Por ejemplo, si eres un gamer que necesita Internet rápido sin importar dónde estés, y un hotspot que pueda permanecer cargado durante largos períodos de tiempo, entonces necesitarás un hotspot apto para juegos con mayor duración de batería y un plan de mayor velocidad que alguien que simplemente necesita una conexión wifi confiable para responder emails mientras viaja en el extranjero.
Asegúrate de investigar e invertir en un hotspot que se adecúe a tus necesidades. Ten en cuenta la cantidad de dispositivos que utilizarás en conexión con tu hotspot personal, lo que necesitarás que hagan esos dispositivos y cuánto tiempo necesitarás que el hotspot pueda durar sin una fuente de alimentación para cargar la batería. Si tienes pensado estar sin una fuente de alimentación durante períodos prolongados, es posible que valga la pena invertir en un hotspot que no solo tenga una batería de larga duración, sino que también pueda mantener cargados otros dispositivos.
3. Conecta tu dispositivo móvil por USB
Una forma de obtener velocidades de Internet más rápidas y crear una red más segura al utilizar un hotspot móvil es conectar el dispositivo móvil directamente a la laptop por tethering. Para conectar tu dispositivo por tethering, necesitarás un cable USB. Aquí tienes una guía rápida sobre cómo funciona:
Cómo conectar tu dispositivo mediante USB:
En iPhone:
- Conecta tu teléfono a tu laptop usando un cable Lightning a USB o simplemente un cable USB (dependiendo del tipo de iPhone que tengas).
- Ve a Configuración > Hotspot personal y actívalo.
- Si se te solicita, elige Solo USB.
- Tu computadora debería reconocer la conexión y enrutar Internet a través de tu teléfono.
En Android:
- Utiliza un cable USB para conectar tu teléfono a tu computadora.
- Ve a Configuración > Red e Internet > Hotspot y uso compartido de datos.
- Activa Uso compartido de datos mediante USB.
- Tu dispositivo ahora funcionará como una fuente de Internet por cable para tu laptop.
Si bien los hotspots wifi pueden ser vulnerables a los hackers, al conectar tu dispositivo móvil por USB es más difícil hackear tu red, ya que está vinculada directamente a tu laptop u otro dispositivo. Además, el tethering mantendrá la batería de tu teléfono móvil cargada mientras lo usas como hotspot. Aunque el tethering suele ser más rápido y seguro, igualmente se aplicarán las tarifas de datos para tu hotspot móvil.
4. Utiliza un Adpatador wifi USB
Otra herramienta para acceder a Internet es utilizar un adaptador wifi USB, también conocido como dispositivo de datos. Se enchufan a tu laptop y se conectan directamente a una red móvil mediante una tarjeta SIM y un plan de datos prepagado.
Cómo utilizar un adaptador wifi USB:
- Compra un adaptador USB compatible con tu laptop (algunos están bloqueados por el proveedor, otros no).
- Instala una tarjeta SIM con un plan de datos de un proveedor de telefonía móvil.
- Enchufa el adaptador en un puerto USB de tu laptop.
- Instala los programas o controladores necesarios (es posible que tu dispositivo te lo pida automáticamente).
- Conéctate a la red y empieza a utilizar los datos.
Los adaptadores wifi USB son ideales si no quieres depender de la batería o del plan de datos de tu smartphone. Son pequeños, fáciles de transportar y perfectos para navegar por Internet, enviar emails y hacer videollamadas cuando estás fuera de casa.
Por qué podrías necesitar un proveedor de servicios de Internet (ISP)
Aunque los hotspots móviles, los adaptadores USB, el uso compartido de datos y las redes wifi públicas son excelentes soluciones temporales, pueden no ser suficientes para las necesidades diarias y a largo plazo de Internet, especialmente si utilizas varios dispositivos o necesitas velocidades más constantes.
Estas son las razones por las que aún podría ser conveniente invertir en un proveedor de servicios de Internet (ISP) tradicional:
- Mayor ancho de banda y velocidad para streaming, videollamadas, juegos y carga de archivos.
- Conexiones más estables sin preocuparse por la intensidad de la señal o la cobertura móvil.
- Opciones de datos ilimitados que no se agotarán antes de que estés listo.
- Mejor soporte y equipamiento para hogares con muchos dispositivos conectados.
En resumen, las 4 alternativas mencionadas anteriormente son excelentes para viajes, emergencias o un uso ocasional de Internet, pero para el uso diario en el hogar, un proveedor de servicios de Internet (ISP) confiable sigue siendo la mejor solución a largo plazo.
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Fuentes:
https://www.forbes.com/advisor/business/public-wifi-risks
https://support.apple.com/en-us/111785
https://www.pcmag.com/how-to/turn-your-phone-into-a-wi-fi-hotspot
https://www.highspeedinternet.com/resources/mobile-hotspots
https://support.apple.com/en-us/111785
https://www.androidauthority.com/mobile-hotspot-setup-631280
https://www.howtogeek.com/170302/the-htg-guide-to-tethering-your-android-phone
https://www.techradar.com/computing/wi-fi-broadband/how-to-use-a-broadband-dongle
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