Por qué el futuro de las tiendas tradicionales podría depender de redes más rápidas.

La era de las redes de próxima generación transformará nuestra manera de comprar, no solo por Internet y desde nuestros smartphones, sino también en las tiendas físicas. Las velocidades mejoradas y menor latencia de las redes en nuestros teléfonos son ingredientes cruciales para la próxima evolución del sector minorista. Para los vendedores, es esencial introducir un cambio en la forma en que hacen negocios, para mantenerse competitivos en este panorama tan cambiante.

Si bien ciertas opciones innovadoras, desde personalización basada en IA hasta vestidores virtuales, no son desconocidas para la industria, la tecnología del mañana podría mejorar la funcionalidad y posibilitar un cambio en todo el sector en cuanto a experiencia del cliente y personalización. Imagina probarte una chaqueta que te encanta, no poder comprarla porque es demasiado costosa y luego recibir un email para avisarte que ahora tiene 30% de descuento. Este es solo un ejemplo de cómo las tiendas físicas podrían aprovechar los datos de los clientes para atraerlos según sus conductas individuales para mejorar las ventas.

Alice Fournier, vicepresidente de comercio electrónico y e-commerce y omnicanal para Kantar, explicó que hay una ambiciosa visión de lo que los datos y la conectividad podrían hacer en el espacio de la tienda física. "5G se trata de la capacidad de ofrecer estas nuevas experiencias conectadas y de procesar datos mucho más rápido", expresó. ¿La realidad? Los sistemas actuales todavía no se han puesto a la altura.

Por ahora, los comercios minoristas que pueden capitalizar la tecnología de punta están absorbiendo costos significativos. Y dichos costos exorbitantes hacen que las experiencias conectadas sean un nicho muy específico, agregó Fournier. Pero 5G ofrece una oportunidad para que la tecnología se aplique fuera de unos pocos mercados especializados.

Al aprovechar los beneficios de las redes móviles de alta velocidad y baja latencia, los comerciantes minoristas podrán personalizar ofertas y crear experiencias para sus clientes en formas totalmente nuevas.

"Un comprador leal podrá ir a una tienda y recibir ofertas personalizadas según sus compras anteriores", predijo Fournier. También señaló que los minoristas tratarán de aprovechar funciones de proximidad, mediante las cuales podrán mejorar las compras de los clientes al enviar ofertas y sugerencias a los dispositivos móviles, por ejemplo, cuando el cliente se acerque a un estante específico.

"Podríamos encontrar una situación en la que se tomará en cuenta el patrón de movimiento del cliente dentro de la tienda", añadió. "Si estoy parada delante de un estante por determinado tiempo, quizás un miembro del personal podría recibir un aviso para ayudarme".

Es posible que todavía falten unos años, pero como 5G puede procesar datos mucho más rápido, permite a los minoristas seguir a sus compradores con mayor exactitud. Y eventualmente, según Fournier, afectará al punto de venta y los tipos de tecnologías usadas para pagar, lo que permitirá reducir el tiempo de espera.

Por ejemplo, podrías pagar directamente a través de pago móvil o que los productos se carguen a tu cuenta al salir, como pasa en la tiendas Amazon Go. "Estas tecnologías ya existen, pero los comerciantes minoristas necesitan el poder para procesar estas transacciones más rápido. Todo esto funciona mucho mejor con redes móviles más rápidas", expresó.

Para cualquier minorista, especialmente para aquellos con tiendas físicas, las redes de próxima generación presentan un largo camino a recorrer: desde administrar los posibles costos hasta lograr una comprensión integral de la nueva tecnología, las herramientas y las experiencias. Fournier sugiere que los minoristas adopten esta postura: la tecnología de próxima generación puede ayudarlos a crear su identidad y fortalecer su marca.

"No querrán implementar tecnología por la tecnología misma", advirtió. "Es fácil perder el rumbo al querer ofrecer lo más nuevo, pero deben encontrar la solución que ofrezca los mejores resultados y la mejor experiencia para sus clientes".

A medida que las tiendas físicas adopten una estrategia más digital, surgirán inevitablemente nuevos desafíos de RR. HH. Según Fournier, podría haber un cambio en el papel que juegan los empleados al volverse las tiendas más automatizadas, por ejemplo. "Hay interrogantes en cuanto a los recursos y el significado de la tienda conectada", agregó. "Es importante, sin embargo, que los empleados comprendan que esto no significa necesariamente que la tecnología ocupará los puestos de las personas, pero podría cambiar lo que estas hacen en el día a día".

A pesar de las inquietudes con respecto a que la tecnología reemplace a los seres humanos en el sector de las ventas minoristas, los empleados se sienten optimistas. Una encuesta reciente demostró que casi dos tercios (62%) de los encuestados piensan que las nuevas tecnologías generarían nuevas oportunidades laborales.

Si se implementa correctamente, una estrategia digital sensata puede optimizar la captación de clientes. Además, se espera que los consumidores obsesionados con lo móvil de hoy en día respondan favorablemente si hay incentivo suficiente para comprar en una tienda física, incluso si eso significa un viaje hasta el centro comercial.

Publicado originalmente en Forbes.com.