Desde que los institutos y universidades adoptaron la enseñanza virtual hace 18 meses, la mayoría ha avanzado tanto como les fue posible por sí solos. Para ofrecer el tipo de experiencia que satisface y excede las expectativas de los estudiantes, las instituciones educativas necesitan ayuda de compañías cuyas operaciones maximizan el valor y el impacto de la tecnología.
Las escuelas, el gobierno, los miembros de servicios de emergencia y otras organizaciones dependen de las comunicaciones siempre activas de T-Mobile, nuevas percepciones de lo que es posible con 5G y otras poderosas tecnologías. Lo que los institutos y universidades han implementado en los últimos 18 meses apenas roza el potencial que la tecnología tiene para ofrecer a la educación superior.
Consideremos una comunicación bilateral confiable como un elemento fundamental del aprendizaje. Según la FCC, 21 millones de habitantes de nuestro país no cuentan con acceso a Internet confiable.9 Un estudio de Microsoft sugiere que la cantidad es aún mayor, con 162 millones de habitantes que no tienen acceso a Internet a velocidades de banda ancha.10
T-Mobile ha facilitado conexiones de banda ancha en algunas de las áreas más remotas del país, aprovechando la red 5G de la compañía para ofrecer experiencias de aulas en tiempo real a personas que no pueden asistir a clases en persona debido a las distancias geográficas. Nuestra experiencia significa que podemos ofrecer fácilmente el acceso a banda ancha que es tan esencial para una enseñanza por Internet eficaz. Algunos ejemplos incluyen nuestro trabajo con Western Governors University (WGU), la universidad por Internet sin fines de lucro más grande del país, para ofrecer conectividad móvil para ayudar a los estudiantes a cursar estudios superiores.11