Aparte de la pandemia, la mayoría de los líderes de la industria logística estarían de acuerdo en que la visibilidad ha aumentado en los últimos años, y apuesto a que aún más estarían hoy de acuerdo en que todavía hay margen para mejorar. En todo el sector, los dispositivos del Internet de las cosas (IoT) están creciendo en utilidad1 y uso2. Los dispositivos conectados ofrecen a las compañías de logística visibilidad directa de sus recursos en tránsito, la capacidad de monitorear el estado de la cadena de frío y de rastrear la utilización a lo largo de todo el ecosistema, y mucho más. Y, en el centro de estos avances, se encuentran unas cuantas categorías de tecnologías esenciales que ayudan a sostener la continuidad de la cadena de suministro hoy y que están listas para acelerar esas operaciones en un mundo pos-COVID.
IoT: Allied Market Research calcula que el gasto mundial en IoT en el mercado del transporte crecerá más del doble para 2023, y se prevé que llegará casi a $330 mil millones. Ese crecimiento en el gasto seguirá aumentando, incluso cuando los costos de sensores y controladores IoT se reduzcan rápidamente debido a la producción en serie y las economías de escala.3 Precios más bajos significan más dispositivos, y estos dispositivos probablemente estarán presentes en todas partes, en el interior y el exterior de los vehículos, en los contenedores y en los palés. Lo que no estará en todas partes son las redes Wi-Fi, que pueden deteriorarse rápidamente a medida que se agreguen más y más sensores. Además, si bien Wi-Fi puede ofrecer más opciones que la red celular, también se obstruye con mayor facilidad cuando hay obstáculos y la conectividad disminuye rápidamente si los dispositivos salen del área designada. Por otro lado, las redes celulares se adaptan mejor a este entorno debido a los protocolos y el hardware subyacentes diseñados para tales usos4.
La elección entre Wi-Fi y celular para tu proyecto de IoT dependerá en gran medida de las prioridades del dispositivo y del uso al que esté destinado. Por ejemplo, si la seguridad es de interés primordial, es posible que las empresas se inclinen por las redes celulares, ya que generalmente tienen normas de seguridad más altas que las redes Wi-Fi. Las compañías de logística requieren una red móvil confiable que pueda llegar a todos los rincones del país y mantener a sus dispositivos conectados entre sí. Las redes celulares nacionales lo logran.
IoT de banda estrecha: otro avance reciente que está creando mayor visibilidad, especialmente en áreas remotas, es el estándar IoT de banda estrecha (NB-IoT). La GSMA describe NB-IoT como una "tecnología de baja potencia y área amplia (LPWA) desarrollada para posibilitar una amplia gama de nuevos dispositivos y servicios IoT" que "mejora significativamente el consumo energético de los dispositivos del usuario, la capacidad del sistema y el aprovechamiento del espectro, especialmente en cuanto a cobertura profunda"5.
Por ejemplo, cuando una compañía implementa miles de miles de rastreadores de activos, los costos por servicios y dispositivos pueden aumentar rápidamente. Sin mencionar que, cuanto más grande sea la batería, más grande será el rastreador y más difícil será mantenerlo en funcionamiento, especialmente en el caso de activos retornables, como estructuras, jaulas y contenedores. NB-IoT ofrece la opción más eficiente y rentable para el seguimiento de activos en todo el país y posibilita la duración extendida de la batería para los dispositivos (hasta 10 años) con amplia cobertura que llega a sitios rurales y gran penetración en interiores. Y, para aquellas compañías que se preocupan por la seguridad de sus dispositivos conectados, las redes móviles ofrecen ventajas de seguridad específicas de las redes de telecomunicaciones en comparación con otras tecnologías que operan en el espectro sin licencia como LoRAN o Sigfox.
Seguimiento de activos: en las palabras de Vidya Subramanian, vicepresidente de Productos de Roambee, "saber en tiempo real dónde se encuentra el producto marca la diferencia entre entrega o desperdicio".
El seguimiento de activos en una red NB-IoT celular permite a las compañías de logística hacer el seguimiento y gestionar sus activos en cada depósito, remolque o contenedor, incluso a nivel de un paquete específico. Esto permite una visibilidad de alto nivel y en gran detalle de tus procesos logísticos. En vista de los que ahora sabemos acerca del COVID-19 y cómo se transmite, garantizar la seguridad y la integridad del empaque desde el área de carga hasta que llega al cliente es tan importante como llevar el producto a destino de manera eficiente. Con esta visibilidad ininterrumpida, los equipos pueden evitar problemas en forma proactiva o ajustar rápidamente su enfoque si surge algún inconveniente6. No es de extrañar que se prevé que el mercado del seguimiento de activos casi se duplique a $32 mil millones para 20247.
Soluciones de gestión de flotas: los últimos avances en IoT y sensores conectados han incrementando en gran medida las capacidades de los sistemas de monitoreo de activos, que ahora pueden ofrecer una gama de información mucho más amplia acerca de la ubicación y el estado del remolque así como del estado de la carga que lleva. Con la ayuda de esa información, los gerentes de flota tienen una visibilidad mucho más detallada de la operación de los vehículos. Ya sea que se enfoquen en el cumplimiento de horas de servicio (HOS), tengan que gestionar la capacidad de transporte disponible, maximizar el rendimiento del combustible o identificar la necesidad de mantenimiento preventivo, tanto los expedidores como los conductores tendrán la información necesaria para cumplir sus tareas con éxito.
Este acceso mejorado a información y datos detallados también puede ayudar a reducir costos y mejorar el balance final. Por ejemplo, los expansores de entrada y salida (IOX) pueden controlar partes individuales de los vehículos, como por ejemplo, los sensores de presión de neumáticos. Estos dispositivos pueden ofrecer datos a nivel de los componentes acerca de problemas como neumáticos desinflados que, además de afectar la seguridad del conductor, también pueden incrementar el consumo de combustible del vehículo en hasta 15%8.