Hay muchas razones por las que puedes encontrarte en esta situación. Entonces, ¿cómo puedes saber si es un problema del proveedor de servicios de Internet (ISP) o algo que puedes solucionar fácilmente por tu cuenta? Empecemos con cuatro soluciones sencillas y sigamos a partir de ahí:
- Apaga el enrutador/módem y vuelve a encenderlo. Para reiniciar el sistema, desenchufa el módem y el enrutador, espera un minuto y luego vuelve a enchufarlos para ver si consigues volver a conectarte. Suena casi demasiado sencillo, pero en realidad es lo primero que te sugerirá tu ISP cuando llames al servicio de asistencia técnica. También pueden producirse problemas de enrutamiento de Internet si tu sistema tiene unos tres o cuatro años. De ser así, obtener un nuevo equipo podría solucionar el problema.
- Cambia la ubicación de tu enrutador. Para proporcionar conectividad a los dispositivos de toda tu casa, quizás tengas que mover el enrutador de sitio hasta que encuentres un lugar más adecuado. Si eso no es posible, una sistema de malla puede ser una forma de solucionar esos frustrantes problemas de señal débil. En lugar de depender de un único enrutador, un sistema de malla utiliza varios puntos de acceso llamados "nodos" repartidos por toda la casa para ofrecer una mejor cobertura.
- Asegúrate de que no sea un problema de virus o malware. Una de las causas más comunes de una conexión lenta (o nula) a Internet puede ser la presencia de virus o malware en alguno de tus dispositivos. Si no tiene software antivirus en sus dispositivos, debería conseguirlo. Si ya tienes protección, asegúrate de tener la versión más actualizada y configúrala para que busque malware o virus con regularidad.
- Asegúrate de que tienes el plan adecuado. Gracias al número cada vez mayor de dispositivos conectados en nuestros hogares, la cantidad de datos que utilizamos se está disparando. Si tienes una familia numerosa que utiliza varios dispositivos a la vez, la conexión puede ralentizarse considerablemente, por muy bueno que sea tu proveedor de Internet. Consulta tu factura y tu plan. Podría ser solo cuestión de comunicarte con tu ISP para encontrar un plan con más datos. Si el plan que necesitas es demasiado caro con tu ISP actual, busca otras opciones.
Si has comprobado todo lo anterior y sigues teniendo conectividad lenta (o inexistente), probablemente se trate de un problema más profundo del ISP. Estos son algunos indicios de que puede haber llegado el momento de buscar uno nuevo:
- Parece que los cortes de Internet son la norma, no la excepción. Tanto si tu proveedor de Internet alega «mantenimiento» con frecuencia como si un poco de mal tiempo hace que tu conexión se corte, Internet se cae en tu área con demasiada frecuencia. Es posible que estés tratando con una empresa que tiene una infraestructura anticuada, como líneas DSL o de cable antiguas, o tal vez tengas servicio por satélite que parece fallar cuando llueve, nieva o incluso en días nublados. Puede que haya llegado el momento de investigar los diferentes ISP disponibles en su zona.
- Tus vecinos tampoco consiguen una buena conexión. A veces, un ISP simplemente tiene demasiadas zonas muertas en un área determinada debido a problemas de cobertura de la red. Una rápida visita a las redes sociales de tu comunidad te ayudará a averiguar si es así. Un ISP cuyo servicio funciona muy bien en una zona, pero que resulta ser pésimo en la tuya, obviamente no es una buena opción. Investiga un poco y prueba otros proveedores de Internet para encontrar una mejor cobertura de red y, por lo tanto, mejor conectividad.
- Un servicio de atención al cliente deficiente parece ser lo habitual. Si notas una tendencia de servicio al cliente deficiente cuando se trata de obtener respuesta a tus preguntas o de resolver tus problemas de conectividad, es definitivamente el momento de buscar otras opciones. Los ISP que no ayudan o que tienden a cobrarte un dineral por cada equipo o llamada de servicio no son una buena opción para nadie. Investiga un poco para averiguar cómo se sitúa tu proveedor de servicios de Internet en comparación con otros en lo que se refiere a cargos excesivos, contratos largos y problemas de atención al cliente.
T-Mobile ofrece Internet residencial confiable en la red 5G más grande del país A diferencia de los ISP tradicionales, que pueden exigir un contrato anual, además de cargos por equipos y de servicio, T-Mobile ofrece Internet residencial a precios razonables, sin contratos anuales ni cargos mensuales adicionales para cuentas elegibles. Comprueba si Internet residencial de T-Mobile está disponible en tu área ahora y luego prueba el servicio por 15 días para ver si es una buena opción para ti.
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Provisto a través de la red celular 5G; las velocidades varían según factores que afectan a las redes móviles. Uso típico basado en el uso de un grupo familiar promedio de EE. UU. de aproximadamente 430 GB/mes.
Fuentes:
https://www.ookla.com/articles/5-critical-internet-services-q2-2022