¿Qué tienen que ver las cadenas de suministro digitales con la satisfacción del cliente?
La respuesta corta: todo. La digitalización mejora la previsión y planificación del inventario, lo que te permite anticiparte a la demanda, reducir la probabilidad de que se agoten las existencias y responder con rapidez cuando la popularidad de un artículo aumenta repentinamente. Si un producto se vuelve viral en las redes sociales, los minoristas que cuenten con las soluciones digitales de cadena de suministro adecuadas pueden pivotar rápidamente para acelerar las entregas, contratar proveedores adicionales o tomar otras medidas para que ese producto llegue a las tiendas o a las puertas de los clientes.
Las etiquetas de identificación por radiofrecuencia (RFID) pueden aumentar la precisión del inventario hasta un 98%, por lo que los empleados pueden informar con exactitud a los clientes sobre las existencias y su ubicación. En las primeras fases de la cadena de suministro, la geolocalización (que utiliza RFID y GPS) puede alertar a tu operación minorista cuando un envío sale de la fábrica o el almacén, con lo que podrás actuar con rapidez si se producen retrasos. Con una mejor visibilidad de la ubicación de los productos y un mayor control de sus movimientos, los minoristas pueden proponer a los clientes opciones como recoger los productos el mismo día o elegir el día de entrega.
Los clientes esperan este nivel de servicio de los minoristas. Bain descubrió que, en EE.UU., más del 75% de los pedidos de comestibles en línea llegan el mismo día, y que la frustración más común de los compradores es cuando no encuentran un artículo que desean o no está disponible.
En 2023, los minoristas perdieron $1.2 trillones debido al desabastecimiento. Y un informe de IBM demostró que para cerca de un tercio de los consumidores, el deseo de una mayor disponibilidad del producto es una de las tres razones principales por las que cambiarían de marca.
En cambio, los clientes satisfechos tienen más probabilidades de repetir. Casi tres cuartas partes de los consumidores afirman que una mejor experiencia de compra a través del comercio electrónico los fideliza más a una marca o minorista. Y McKinsey determinó que al mejorar la experiencia del cliente, las empresas pueden aumentar los ingresos por ventas entre un 2% y un 7% y la rentabilidad entre un 1% y un 2%.